Viviendas de interes social en concreto
Nadie se imaginaba que la ONG Corporación Casa, encargada de construir Pinares de Oriente y que en 2009 era felicitada por la Contraloría por la adecuada ejecución de otro proyecto de Viviendas de Interés Social, también en Villavicencio, hoy esté en quiebra, embargada y sea señalada como culpable de que uno de los más importantes planes en el Meta esté paralizado.
Desde la firma del convenio, entre la Gobernación del Meta y la ONG, se cometieron errores que hoy, cinco años después de la supuesta fecha de inauguración, siguen sin corregirse y, por el contrario, parece ser un imposible de cumplir porque no hay dinero para ejecutarlo, pese a que ya se han desembolsado alrededor de $16.000 millones, de los $22 mil millones que costaba en un principio la construcción de las casas.
El primero de esos yerros se dio en septiembre de 2009, dos meses antes de formalizar el convenio para desarrollar el proyecto. Ese mes, el Consejo de Estado se pronunció frente a este tipo de convenios y mencionó que las entidades públicas deben determinar con precisión su objeto, términos de cumplimiento de la obra, obligaciones de las partes, aportes y coordinación. Esto no se cumplió, pues cuatro meses después de firmado el convenio no se había movido una piedra para construir las viviendas y no había informe de interventoría.
Según la ONG, el desbarajuste del proyecto se basó en la demora del Gobierno para el pago de los giros de subsidios. Más de 20 meses sin recibir un peso provocó que la Corporación se endeudara para cumplir con las obligaciones contractuales. Al no tener dinero para pagar sus deudas, fue embargada y ahora el Gobierno no puede invertir dineros públicos en un proyecto con riesgo de que esa plata se perdiera.
“Mi error fue haber hecho público mi voto por un candidato contrario al gobernador Alan Jara. Cuando hubo cambio de administración, empezaron las represalias. Desde que entró Carmelo Pérez como gerente de Vivienda del Meta, atrasó trámites como la expedición de un aval bancario que duraba 15 días, lo sacó en 18 meses”, dice Óscar Méndez, gerente de la Corporación Casa.
Esta ONG, con más de 13 años de experiencia, que tenía 100 empleados, ahora tiene sólo 10, todos con sueldos atrasados. Sin embargo, según Méndez, ya en Pinares se hicieron las obras de urbanismo y cimentación, y las casas van en un 50% de construcción.
Darío Vásquez, gobernador del Meta cuando se firmó el convenio, cree que la génesis del problema es que “por alguna razón que está por establecer” no le giraron los recursos a la Corporación y ésta entró en iliquidez, lo cual detuvo la dinámica económica que garantizaba la continuidad del proyecto. “El departamento tiene un argumento para no girar que es válido, ya que la corporación no ha podido suscribir una póliza que garantice el manejo de esos recursos”, explica Vásquez, quien hasta ahora no ha sido vinculado a investigación alguna por este caso.
Pero, como a la ONG se le declaró un incumplimiento de contrato, ninguna compañía le puede suscribir la póliza de garantía.
Algunos piensan que este problema podría ser usado como “caballito de batalla” en las campañas políticas que se avecinan, pues Vásquez es aspirante a ocupar de nuevo el cargo de gobernador, con el perjuicio para las 617 familias afectadas.
Por su parte, Carmelo Pérez, exgerente de Vivienda del Meta, dijo que durante su gestión logró que la nación girara los recursos comprometidos para Pinares de Oriente por el orden de los $6.700 millones. “Cuando se estaban ejecutando esos recursos embargan el predio donde se construía el proyecto. El error fue que el terreno estaba en cabeza de la Corporación Casa, pese a que se había comprado con dineros de la Gobernación. Cuando sucede eso, para proteger el dinero público, se da la orden de no seguir girando los recursos”, explica Pérez.
Asesores en materia de contratación dicen que por este caso la Gobernación del Meta se ha salvado de una dura sanción del Gobierno Nacional, lo cual impediría recibir subsidios de vivienda en otros planes de construcción. Mientras Corporación Casa no tiene plata, la administración departamental, desde septiembre de 2014, tiene que desembolsar mensualmente $400 mil por cada beneficiario, como subsidio de arriendo, por orden de la Corte Constitucional.
La última jugada para tratar de salvar el proyecto la hizo el gobernador Alan Jara, quien radicó una petición ante la Alcaldía de Villavicencio con el fin de que sea ésta la encargada de realizar el trámite de intervención, una herramienta que permite a las administraciones locales actuar cuando no se cumple con la ejecución de una urbanización.
fuente: www.elespectador.com
ARQUITECTURA DEL CONCRETO
En un comienzo, el concreto utilizado por los romanos fue una revolución tecnológica en la construcción, al hacer posibles edificaciones magníficas tanto estructural como estéticamente. Un claro ejemplo es el Panteón Romano (127 d.C.), en donde se expone la génesis de la tecnología romana del concreto; su domo central de 43.30 m. de diámetro fue el más grande del mundo hasta la introducción en los tiempos modernos del acero y el concreto reforzado.
Historia reciente Después de mucho tiempo, pasada la época romana, desaparece de la historia hasta la invención del cemento Portland (1824) en Inglaterra. Sin embargo, a finales del siglo XIX, experimentos e investigaciones del material, llegaron a fijar definitivamente sus cualidades y las bases teóricas para su difusión.
Es así como se realizan algunas obras de trascendencia y se reanuda la búsqueda tenaz de los constructores para su utilización, experimentando aún con miedo por la falta de conocimiento profundo de sus ventajas estructurales y plásticas.
Sin embargo, aparece uno de sus precursores, Antonio Gaudi (1852-1926), arquitecto catalán, quien erige uno los edificios más notables y tecnológicamente más avanzados de su tiempo.
Se puede decir entonces, que es hasta los inicios del siglo XX, cuando los arquitectos empiezan a sentir la bondad del concreto y sus condiciones estructurales, dando impulso a la utilización plena y franca de este material.
Obras destacadas Vale la pena destacar al arquitecto Augusto Perret, que no solo hizo del concreto reforzado un material al servicio de la arquitectura sino que puso en práctica la construcción adecuada del nuevo material.
Una de sus obras, la iglesia de Notre Dame De Le Raincy (1922), es probablemente una de las más famosas iglesias modernas realizada totalmente en concreto, en donde incluso fue reemplazada la mampostería tradicional por bloques calados construidos con concreto para generar una libertad estructural y una clara transparencia del interior hacia el exterior.
Podemos hablar también de Freissinet en París; Easton y Robertson, Robert Maillard en Suiza; Pier Luigi Nervi en Italia; Le Corbusier en el mundo; Oscar Niemeyer en Brasil; Saarinen en New York; Paul Rudolf y Félix Candela en México; Minuro Yamasaki y Kenzo Tangue en Japón, para mencionar solo algunos arquitectos e ingenieros que han logrado con el concreto diferentes y avanzadas expresiones.
Le Corbusier por ejemplo, arquitecto suizo, se caracterizó por sus proyectos de grandes bloques representativos con concreto reforzado a la vista y un adecuado manejo estructural en sus edificios altos, de esqueleto liviano y planta sumamente flexible.
De él se destaca, entre muchas de sus obras, la masiva Unidad Habitacional de Marsella, complejo residencial de 17 plantas que descansan sobre enormes pilares en donde el hormigón armado se muestra en toda su expresión.
Es importante destacar también al ingeniero Pier Luigi Nervi, que integró la ingeniería con la arquitectura. De este modo los edificios mejor logrados de Nervi son una incontrovertible fusión de ciencia y arte. Su estética dependía de una enérgica exhibición de los elementos estructurales.
El Palazzeto en Roma (1959), por ejemplo, está cubierto por una bóveda semiesférica integrada por piezas prefabricadas de concreto de casi 60 metros de diámetro. Los apoyos en forma de Y transfieren la carga al cimiento circular en concreto.
El Palazzo Dello Sport (1960) otra de sus obras, construido al igual que el anterior para las olimpíadas del 60, está cubierto por una gigantesca cúpula semiesférica de aproximadamente 100 metros de diámetro con una capacidad para 16.000 personas.
Muestra de esta interrelación ingeniería-arquitectura es la obra del arquitecto Saarinen hijo, la Terminal de la TWA y el edificio de la Terminal, ambos en Nueva York.
En 1967 se construye el edificio en concreto reforzado más alto del mundo en ese momento: El Marina City, obra de Bertrand Goldberg Associates, compuesto en su estructura por dos torres circulares gemelas de 39 metros de diámetro exterior y 60 pisos de altura. Su construcción se hizo de adentro hacia afuera y cada uno de sus núcleos es una columna circular hueca de concreto de la cual arrancan las armaduras radiales para sus entrepisos.
Símbolo continental Ya en 1970, la obra de Jorn Utzon, arquitecto danés: La Opera de Sidney en Australia, tipifica el antirracionalismo que surgió a mediados de la década del 50; un edificio que como la Torre Eiffel o la Torre de Londres, asume el papel de símbolo de una ciudad, si no de un continente, a pesar de que una vez diseñada se creía imposible su construcción dadas sus características.
En el Japón, la llamada tercera generación manejó grandes muros y superficies de concreto, con una relación luz-oscuridad que caracteriza el espacio.
Un claro ejemplo de ello lo manifiesta en sus obras el arquitecto Tadao Ando, quien con este criterio permite al concreto manifestarse en toda su expresión, con colores y combinaciones variadas, o simplemente de forma natural como lo hace en la Capilla sobre el monte Rokko en Kobe (Japón) en donde logra iluminar las superficies de acuerdo con los planteamientos del diseño.
Así podríamos seguir hablando de destacados arquitectos e ingenieros que han dejado inmersas en el tiempo grandes obras que muestran la riqueza del material, pero su descripción sería casi motivo de un libro que expresara detalladamente el importante manejo del concreto en cada uno de estos hitos de la arquitectura del concreto.
Pero sí podemos decir que con el avance de la tecnología, las posibilidades en su manejo se incrementan cada vez más estructural y arquitectónicamente. Infinidad de texturas, colores y formas las vemos reflejadas en edificaciones comerciales, deportivas, civiles y residenciales, con diferentes tratamientos de superficie, con los cuales se pueden lograr estructuras imponentes con agradables acabados en sus fachadas o sencillamente expresivos y cálidos espacios interiores.
Publicación eltiempo.com